Todos hemos estado ahí, o conocemos a alguien que sí: vas manejando por la noche y de repente escuchas la sirena de la policía.
Empiezas a preguntarte a ti mismo:
“¿Cuántos tragos me tomé esta noche?”
“¿Estoy bien para conducir?”
“¿Puedo tocarme la nariz con los ojos cerrados?”
Ese miedo, ese pánico, esa incertidumbre… no vale la pena vivirlos.
Puede parecer obvio, pero es una de las recomendaciones más importantes que puedes seguir.
No solo por ti, sino por quienes te rodean.
Sin embargo, la vida no siempre es blanco o negro, y a veces nos encontramos en situaciones grises. Si ya estás en la carretera y escuchas esa sirena detrás de ti, lo importante es mantener la calma y saber cómo actuar.
🧠 ¿Qué hacer si la policía te detiene?
Incluso si has bebido, tienes derechos. Y lo más importante en este momento es protegerte y no cometer errores que puedan empeorar la situación.
Aquí van tres pasos clave:
No hables. No expliques. No justifiques.
El miedo puede llevarte a decir cosas que luego serán usadas en tu contra. En lugar de hablar… guarda silencio.No admitas nada.
Ya sea en una parada de tránsito o incluso en una escena de accidente, evita decir frases como “sí tomé algo” o “fue mi culpa”.Pide hablar con un abogado.
En Estados Unidos, tienes derecho a recibir asesoría legal. Ejércelo.
☎️ ¿A quién puedes llamar en ese momento?
Guarda este número: 813-503-0212
Con una sola llamada puedes tener acceso a un abogado que te asesora en el momento, te explica tus derechos y te guía en cómo actuar.
Ya sea que se trate de una parada policial, un accidente o cualquier otra situación relacionada con conducción y alcohol, no estás solo.